El día de Año Nuevo (Vladímir Odóievski)
—¡Vino! ¡Vino! ¡Apresúrese, sólo quedan cinco minutos para la media noche!
—Eso no es cierto, falta media hora para el año nuevo… —respondió Viácheslav, señalando con orgullo su reloj de madera con hidras de hierro forjado y rosas sobre la esfera.
—Eso será de acuerdo con tu reloj, que siempre se atrasa una hora entera.
—Aunque a veces lo adelanta dos horas, de manera que quién sabrá qué hora es —dijo otro bromista…
* Traducción: James y Marian Womack
* Editorial: Nevsky Prospects