La isla (Giani Stuparich)
… La pequeña motonave blanca salía del puerto. El anfiteatro de la ciudad, al irse quedando atrás y a un lado, se encendía atónito con el rosa claro del primer sol. Ya la atmósfera estaba trémula por la canícula. Fuera del puerto se respiraba mejor. El azul del mar abierto, en el que se pulverizaba el oro de la luz, acogía jovial la proa ingenuamente audaz. Todos los pasajeros se hallaban en la cubierta para disfrutar del espectáculo…
* Traducción: J. A. González Sainz
* Editorial: Minúscula